Cósmico espejo de tu "amor", planeaba en caminar senderos desconocidos.
Ese mágico lamento, esta cama de nieve y piedra.
Encerrada en una ruina sagrada, desperté con mi corazón convertido en un rabioso volcán. Mi piel pidiendo el piadoso beso del mal.
No, ya no quiero la pureza del sol y las bendiciones de sus castas caricias.
Quiero la brutalidad del Amo de las tormentas, el placer de los secretos nocturnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario